Bagels Caseros

El bagel es un pan nutritivo y altamente versátil. Su característico agujero en el centro lo hace clásico y emblemático. Aunque no único en su forma - también la dona cuenta con un hoyo - fue el primero en la historia con este aspecto.

Contrario a una leyenda común, el bagel no fue creado en Austria en honor al Rey polaco Juan III Sobieski, tras una victoria sobre los otomanes en 1683. El bagel es de Cracovia, en Polonia. Un reglamento de 1610 de dicha ciudad indica que a las mujeres en parto se les debían ofrecer este baigiel. A lo largo del tiempo el bagel se popularizó sobre todo entre la comunidad judía. Los judíos llevaron el pan al Nuevo Mundo, en donde consiguió gran popularidad, particularmente en Nueva York.

El bagel es un pan con doble cocción; primero es pochado en agua y después horneado. Esto asegura un pan denso y compacto por dentro y ligeramente crujiente por fuera. La receta original embarca un proceso de elaboración muy largo, con 12 horas de refrigeración para fermentar la masa.

Esta receta es una versión rápida para preparar bagels en casa. El tiempo estimado de elaboración, incluyendo una hora de reposo y el horneado, es de 2,5 hrs.

Ingredientes para 10-15 panes:

500 g harina

12 g sal

8 g levadura seca

200-300 ml agua tibia

7 g azúcar

40 g mantequilla pomada

80 g clara de huevo

1 yema de huevo diluida con un poco de agua, para barnizar

30 g ajonjolí

Procedimiento:

Tamiza la harina con la sal, la levadura y el azúcar en un bowl grande. Forma un cuenco en el centro y agrega la clara de huevo y 2/3 del agua.

Desde el centro, empieza a mezclar el líquido con la harina. Agrega más agua si lo sientes muy seco.

Una vez formada una masa, agrega la mantequilla pomada. Amasa por 8-10 minutos hasta obtener una bola lisa y elástica. Resérvala en el bowl enharinado.

Cubre el bowl con un trapo mojado en agua caliente. Deja fermentar la masa en un lugar tibio (por ejemplo el horno apagado) por una hora aproximadamente, hasta duplicar su volumen.

Desinfla la masa completamente con las manos. Forma porciones de 10 a 15 partes iguales, según el tamaño deseado. Forma bolas individuales y poncha con el dedo el agujero en el centro.

Calienta una olla con agua para pochar cada bagel por 15 segundos. Colócalos en una charola, barnízalos con la yema diluida y espolvoréalos con ajonjolí.

Hornea los bagels por 15-20 min a 180°C hasta cocidos y ligeramente dorados.

Sírvelos con lo que más te gusta. El clásico lleva queso crema, salmón ahumado y cebolla. A nosotras nos gustan con queso fresco y mermelada de zarzamora.

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